Agartam educación


Desde que llegué a Agartam no he hecho más que aprender, la verdad que es curioso, cuando mi intención inicial era aportar. Quería aportar al mundo semillas para viajar hacia un cambio basado en el amor, en la confianza, en el equilibrio y la felicidad. ¡Que equivocado estaba pensando que podría hacer una gran aportación a través de los valores!, pues en realidad fue todas las vivencias y experiencias que compartí durante estos cinco maravillosos años, los que me enseñaron e hicieron una gran aportación en mí.

Siento que una etapa muy importante de mi vida se termina, y con ello hasta aquí con mis aportaciones para Agartam, ahora se sin duda que gente maravillosa y llena de amor e ilusión llegarán y aportarán lo que mejor sepan hacer. Agartam es una pulsión de cambio hacia una nueva era, y mucha gente resuena con esa energía, a muchos les apetece aportar y aprender. Durante estos años hice grandes amigos dentro de Agartam, amigos que por diversos motivos personales hoy también dejan Agartam, por lo menos su aportación física, porque su aportación energética perdurará a través del tiempo. Debido a su marcha, también siento que es mi momento de apartarme y dejar mi lugar a futuras personas que quieran colaborar en Agartam. Nos vamos confiando en que el amor y la ilusión de los que se quedan, seguirá alimentando los cimientos de algo maravilloso. Con mucho amor y cariño plasmaré a continuación lo que Agartam y sus guías me han transmitido acerca de la educación.

Educar es transmitir, enseñar conocimientos, normas, conductas sociales, es amar y aportar a las nuevas generaciones. Educamos a través del ejemplo, con nuestras palabras, con nuestra voz, con el cariño que transmitimos cada vez que hacemos algo, pues todo aquello que hacemos sirve de ejemplo para nuestros hijos. Educar es estar en el colegio y transmitir a los niños un conocimiento, transmitir una lección de vida, y de nuevo el ejemplo muestra nuestra paciencia. Cuando educamos conscientemente de lo que hacemos, cualquier cosa que transmitamos se afianzará muchísimo más que si lo hacemos desde la inconciencia.

Los valores son atributos asociados al carácter o al comportamiento, son atributos que nos ayudan a caminar hacia el amor, son una brújula en el camino, son un faro en la noche oscura del alma. Los valores son los actos que podemos mostrar a través del ejemplo, explicarlos a través de la palabra o acciones que nos acercan al cariño y el amor. Si un niño tiene que repetir una suma muchas veces para comprender como funciona y así obtener los resultados, imaginemos las veces que tendrá que ver, escuchar, practicar un valor y probablemente equivocarse. Sin una guía o nadie que les ayude, es complicado que puedan aprender e integrar, pero con el amor, el cariño y la ternura necesarias pueden integrar todo esto.

El equilibrio es lo que mantiene una estabilidad dentro de sus vidas, para que se puedan dedicar a aquello que han venido a hacer, o aprender. Sin equilibrio, difícilmente podrán mantener una estabilidad suficiente para integrar. De nuevo viene el ejemplo de los padres y adultos, la educación basada en el ejemplo, es la mejor educación para que puedan integrar y aprender.

Por último, está La Unidad, es el valor que integra todo, cada uno de los valores que les transmitáis y cada paso del equilibrio, los llevarán a una unidad basada en el equilibrio y el amor. Por eso desde aquí, si estas leyendo estas líneas te insto a que eduques a través del equilibrio, los valores y la unidad. Si en algún momento te pierdes recuerda que el ejemplo es la mejor educación, intenta conectar con el amor y como si tuvieses unas gafas que te ayudan a ver una situación desde el amor, puedes plantearte como actuarias si estuvieses actuando desde el amor, eso te ayudará a encauzarte. Y los más importante de todo, recuerda que todos somos amor, que somos luz, que en nuestro interior se encuentra la bondad, el camino y el faro de los niños hacia una nueva era, a veces el camino no es fácil, pero con la guía de los valores y el equilibrio podemos hacerlo más llevadero, pudiendo incluso conectar con la felicidad. Se tu mismo desde tu esencia y escucha tu corazón, transmítele esto a los niños y les educarás desde el ejemplo, entre todos podemos contribuir en amar el mundo que tenemos, y sobre todo, el maravilloso regalo de la vida.
Con todo mi amor Liberto Bosch.





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La aceptación "18 de 36"

A veces en la vida suceden un flujo de cosas que no siempre son de nuestro agrado, la aceptación es el valor que nos ayuda a entender, o por lo menos respetar aquello que nos resulta desagradable o no está en coherencia con nuestra manera de pensar o de sentir. No hay que confundir la aceptación con la resignación, cuando aceptamos una situación desde el corazón intentamos trabajarnos y ver qué es lo que podemos aprender de dicha situación, aunque en ese momento no logremos entenderla del todo, es confiar en la vida y en el universo para que todo suceda de la mejor manera posible. La resignación sin embargo, consiste en rendirse a una situación albergando frustración y rabia, sino ponemos una intención de aprender, esos sentimientos se quedarán enquistados en el interior, es en esa visión positiva de intentar aprender y de confiar en la vida donde radica la diferencia entre la aceptación y la resignación.

Es importante que los niños aprendan a aceptar diferentes circunstancias y cosas que ellos mismos tienen que hacer, por ejemplo, ir al colegio, no es algo del agrado de todos los niños y sin embargo lo tienen que hacer. En el colegio pueden aprender muchísimo, ganar amigos, vivir experiencias entrañables y sobre todo, lo más importante para ellos, aprender. Cuando son pequeños no entienden la importancia que tiene vivir este tipo de experiencias, pero si lo aceptan y confían dejándose fluir, la actitud que tendrán será mucho más positiva que si están en constante lucha por no ir. Es evidente que eso no significa que tengamos que conformarnos con cualquier situación, siempre hay que discernir, pero ante este tipo de situaciones lo mejor es vivirlas desde el aprendizaje y con una actitud positiva.

Meditación de la aceptación

Colócate en una postura cómoda y cierra los ojos, observa tu respiración y relaja todas aquellas zonas de tu cuerpo que sientas que tienen algún tipo de tensión. Pon la intención para que tu pensamiento se detenga, y no te preocupes si no llega a detenerse del todo, este ejercicio es como un entrenamiento y si eres constante dará sus frutos.

Ahora intenta ver una situación de tu momento actual que no entiendes y que es difícil hacer algo para cambiarla, hay veces que tenemos circunstancias en nuestra vida en las que podemos emprender acciones para cambiar cosas, sin embargo, hay otras veces en las que cambiar las cosas no depende sólo de nosotros. Precisamente es en lo que no depende tan sólo de nosotros donde podemos aprender a aceptar, poniendo una actitud positiva e intentando ver la situación con perspectiva.

Ahora de esa situación que has visualizado, intenta sacar un aprendizaje en positivo, probablemente el aprendizaje estará relacionado con lo que te genera esa situación. Si una situación te genera miedo tienes la oportunidad de aprender a superarlo, si una situación te generar rabia tienes la oportunidad de soltar la rabia, si una situación te genera intolerancia puedes trabajarte para ser más tolerante, siempre depende de tu actitud el aprendizaje que nos aportan las diferentes experiencias. Cada vez que te veas ante una situación así, mira con perspectiva e intenta ser positivo, la aceptación te ayudará ante esa situación.

Para los niños

Para que los niños puedan trabajar y comprender la aceptación, es importante que entiendan que beneficio pueden sacar de una situación. Desde un razonamiento positivo les podéis explicar  el porqué de determinadas situaciones a las que a veces se ven obligados a llevar a cabo, cuanto más entiendan más fácil le va a resultar aceptar con positividad.





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La Serenidad "17 de 36"


La serenidad es el valor que nos ayuda y enseña a mantener la calma dentro de la incertidumbre. La prisa a veces nos impacienta, la serenidad ayuda a que conectemos con la paciencia y podamos de ese modo calmarnos y sobrellevar aquello que acontece. Los niños no entienden el concepto del tiempo como los adultos, a menudo se dejen llevar por la impaciencia de aquello que quieren conseguir, si les transmitimos y les enseñamos a conectar con la serenidad, poco a poco se irán haciendo más pacientes y comprenderán mejor cómo funciona el tiempo.

Hay varias formas de poder entrenar la serenidad, unas son con ejercicios de relajación físicos, las otras son con ejercicios de proyección mental.

Cuando el cuerpo se relaja físicamente somos capaces de tranquilizarnos, de serenarnos a nivel físico, siempre que consigamos relajar todos los músculos del cuerpo a nivel físico, estaremos conectando con la calma y la tranquilidad. La mente y las emociones tienen una influencia directa al cuerpo físico, toda preocupación mental y emocional se proyecta de una manera evidente tensando la musculatura. Si mental y emocionalmente estamos tensos probablemente toda nuestra musculatura se tense, aunque si somos capaces de relajar el cuerpo físico la mente y las emociones también se irán relajando. Para la gente a menudo es más fácil relajar el cuerpo, que la mente o las emociones, de ahí que podamos acceder a la serenidad comenzando con ejercicios físicos. A continuación, vamos a ver ejercicios que podrán ayudar a los niños a conectar con la calma interior y de ese modo aprenderán a serenarse, cualquiera de esos ejercicios también se puede aplicar en adultos.

Ejercicios para relajar el cuerpo y aprender a serenarnos.

La respiración es algo que nos acompaña durante toda nuestra vida, se dice que es lo primero que hacemos al nacer y lo último que hacemos al morir. Nadie puede vivir sin respirar, sin embargo, somos capaces de modificar el ritmo de nuestra respiración, a ella va ligada nuestra energía vital. En un momento en el que necesitamos mucha actividad física la respiración se acelera de forma automática y de ese modo recibimos el oxígeno necesario para tal actividad, aunque si mantenemos mucha actividad mental nuestro cuerpo sólo identifica la palabra actividad, lo cual acelera nuestra respiración como si mantuviésemos una actividad física intensa. Desde la actividad es difícil conectar con la serenidad, por eso vamos intentar realizar un ejercicio de respiración consciente que podamos transmitir a los más pequeños, y aprendan de ese modo, a que con la respiración podrán conectar con la calma y aprenderán a serenarse.

Ejercicio de respiración consciente para los más pequeños y los más grandes

En primer lugar, debemos colocar la espalda recta, poniendo la intención de alinearnos con el sol, como si quisiésemos llevar la parte alta de la cabeza lo más cerca del sol. De este modo habremos ajustado el cuerpo a una postura correcta para la espalda.

Ahora cerramos los ojos y llevamos toda nuestra atención a la zona abdominal, nos quedamos observando e intentamos relajar cualquier tipo de tensión muscular. Si le estamos enseñando este ejercicio a los niños les podemos decir que pongan la barriga dura y luego la ablanden todo lo que puedan. Cuando conseguimos relajar por completo la zona abdominal permanecemos unos segundos observando.

Por último llevamos la atención a la respiración intentando observar el recorrido que hace el aire al entrar y salir del cuerpo, como se introduce por la nariz, podemos observar lo frío que está al entrar, seguimos su recorrido y si tenemos el abdomen completamente relajado veremos cómo se expande hacia fuera, debido al empuje que ejercen los pulmones a nuestra cavidad orgánica. Este efecto ayuda a masajear toda la zona orgánica y visceral del abdomen. A los niños les podemos decir que observen cómo se hincha su barriguita al salir hacia fuera y cómo vuelve a su sitio, una barriga en movimiento a través de la respiración es un síntoma de calma emocional.

Este ejercicio lo podemos hacer en cualquier momento del día que necesitemos conectar con la calma y la serenidad, hay que tener en cuenta que la respiración nos acompaña cada momento, y nosotros somos capaces de intervenir en el ritmo y ser conscientes de lo que sucede nuestro cuerpo. Siempre que observamos la respiración es como un ejercicio meditativo en el que la mente deja de pensar para llevar la atención a lo que sucede en el aquí y el ahora, de algún modo nos ayuda a conectar con los principios de la meditación. Lo podemos hacer el tiempo que sintamos necesario, es evidente que los niños lo harán más poquito tiempo, aunque de este modo habrán aprendido una herramienta que en el futuro le podrán dar un gran uso.

Ejercicio de proyección mental para peques y grandes

La proyección mental consiste en imaginarnos que la situación que queremos conseguir ya la tenemos, si lo hacemos bien nos puede conectar con la serenidad. Imaginemos que un adolescente quiere alcanzar la mayoría de edad, y tiene impaciencia por ello. Si hace un ejercicio de proyección mental en el que se visualiza dentro de la edad y conecta con esa realidad, a nivel emocional se dará cuenta de que ese hecho llegará. Es absurdo preocuparse por algo que va llegar, es posible que poco a poco aprendan a que el tiempo no se puede acelerar ni disminuir, tan solo nos queda disfrutar del momento, preocuparnos por algo que va llegar no tiene demasiado sentido.

En primer lugar, de nuevo podemos alargar la espalda para que la cabeza esté lo más cerca del sol. Cerramos los ojos y realizamos el ejercicio anterior de serenar la respiración. Una vez hemos serenado la respiración, hacemos un ejercicio de visualización proyectándonos en la situación que queremos alcanzar. Nos visualizamos en el momento que anhelamos, intentándonos ver y sentir lo que nos aporta. si entendemos que es una realidad que llegará, no sirve preocuparnos. Si es algo que puede suceder o no, tampoco sirve preocuparnos. Es muy interesante hacer este ejercicio y observar cómo nos sentimos emocionalmente, si verdaderamente proyectándonos a ese momento sentimos serenidad, si no la sentimos quizás puede ser que no sea nuestro camino.

Por último, es importante que nos digamos mentalmente que es absurdo preocuparse por esa situación, que en un futuro será una realidad, y si esa realidad no sucede, entonces es absurdo preocuparse por algo que no sucederá. La felicidad se encuentra en el momento presente, en el Aquí y el Ahora, tan solo debemos aprender a disfrutar del momento presente. La serenidad es el primer paso para conectar con la felicidad.

Artículo escrito por Liberto Bosch




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La Voluntad "16 de 36"


La voluntad es aquella fuerza que nace del interior y nos permite llevar acabo todo lo que sentimos. Es la primera energía que nos ayuda a materializar el plan de vida, también nos impulsa a hacer las pequeñas cosas del día a día. Si los pequeños tienen la voluntad presente desde la niñez, sabrán que pueden llegar a hacer todos los propósitos de su alma, la confianza que la trabajamos en el pasado artículo es lo que los prepara para hacer uso de la voluntad.

Todas las personas en un momento o en otro de sus vidas pueden sentir cansancio, estrés y posteriormente pereza. Si cogemos la pereza como una toma de conciencia para trabajar la voluntad y enseñamos a los niños a hacerlo, ellos aprenderán una valiosísima herramienta de conciencia. Podrán regular sus emociones adquiriendo mayor autocontrol y voluntad para caminar hacia delante.

Explicando a los niños lo que es la voluntad

En un momento en el que los niños tengan pereza por hacer algo, podemos explicarles que la voluntad es la energía impulsora para seguir adelante más allá de la pereza. Es muy probable que frente algunas obligaciones o tareas de colaboración en casa tengan pereza, pues es el momento idóneo para explicarles lo que es la fuerza de voluntad y cómo obtenerla.

Un método sencillo es explicarles que la voluntad es una energía que nace del interior y la pueden controlar a través de la intención, si ponen la intención para hacer aquello que es necesario en el momento presente les abordará una fuerza que nacerá de su interior y esta será la voluntad. Es tan sencillo como explicarles esto, invitamos también a que lo mayores lo prueben y así puedan transmitir desde el ejemplo aquello en lo que están intentando educar.


La fuerza de voluntad les permitirá llegar y hacer todo aquello que se propongan.

Meditación para fomentar la voluntad

Nos colocamos en una posición cómoda con la espalda recta, cerramos los ojos y respiramos profundamente hasta tres veces. Permitimos que el abdomen se relaje y nuestra mente se vaya acallando poco a poco, ponemos la intención para detener el pensamiento y permitimos que suceda.

Ahora visualizamos una esfera de color blanco que se posa en el abdomen, una sensación de ingravidez nos nace desde nuestro interior, como si cada vez pesásemos más poco. Sentimos como si estuviésemos flotando, la esfera empieza a crecer y abarca todo nuestro cuerpo, nuestras emociones están en calma total. Sentimos un estado de paz, serenidad y armonía.

La confianza es el sentimiento que precede a la voluntad, en primer lugar, confiamos en que somos capaces, somos grandes y tenemos fuerza para hacer todo aquello que nos proponemos, visualizamos ahora la voluntad que nace en el centro de nuestro abdomen en color de luz amarilla. Conforme aumenta nuestra confianza en nosotros mismos la luz empieza a expandirse hacia fuera, esa luz crece y crece cada vez más llegando a abarcar la situación que tenemos que abordar en este momento, llegando a cubrir todo aquello que tenemos que realizar e incluso nos podemos ver a nosotros mismos haciéndolo. Ahora estamos preparados con la voluntad necesaria para emprender nuestro camino. Fin

Artículo escrito por Liberto Bosch





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La confianza "15 de 36 ciclos"


La confianza es el sentimiento y la energía que nos impulsa a avanzar sin miedos, cuando confiamos dejamos el miedo atrás y seguimos nuestro camino confiando en la belleza de la vida. Cuando estamos alineados con la vida y el flujo constante de su danza mágica, podemos confiar en que esa danza traerá todas las experiencias necesarias para seguir creciendo. Cuando aprendemos a confiar en nosotros mismos nuestras capacidades afloran y las cualidades que poseemos de forma innata se expresan al mundo. Si confiamos en la vida podemos perder el miedo y la preocupación de lo que acontecerá en cada momento, pues aprendemos que siempre llega aquello que uno necesita. Cada lección que llega a nosotros es una oportunidad única de crecer en ese momento, no importa lo que aparezca ante nosotros, lo que de verdad importa es si nosotros confiamos y que actitud ponemos ante tal situación.

Cuando un niño aprende a confiar en si mismo aumenta su autoestima y se desarrolla su potencial. Para ello los niños se tienen que sentir arropados por los adultos y estos a través del ejemplo les enseñarán más lecciones que si les dan un consejo. De forma constante los niños aprenden en base a las acciones que realizan los adultos de su entorno, de ahí que si un adulto avanza con miedo, este se transmita al niño, si por el contrario un adulto avanza en plena confianza hacia su ser y hacia la vida, el niño aprenderá a avanzar del mismo modo.
Para poder transmitir confianza a los niños podemos servirnos del elogio cuando hagan algo bien hecho, de esta forma reforzareis su confianza en las cualidades que posean. Si en algún momento se tiene miedo a la hora de avanzar en algo concreto se puede compartir con los demás ese miedo y mostrar como avanzáis hacia vuestro objetivo sin dejar que el miedo os paralice, de ese modo mostrareis una forma de afrontar el posible miedo que pueda surgirles por algo en el futuro.

A continuación, vamos a ver una meditación que les ayudará a conectar con la confianza a ellos y a vosotros.

Meditación de la confianza

En esta meditación vamos a aprender a conectar con nuestro corazón y caminar hacia la confianza.
Cerramos los ojos en una posición cómoda, a ser posible con la espalda erguida, aunque también se puede hacer tumbados. Relajamos todo el cuerpo y mientras lo vamos haciendo ponemos la intención de que nuestra energía se vaya relajando. La intención es capaz de modificar nuestra energía y nuestro pensamiento, si pones la intención de no pensar en nada, el pensamiento irá entrando en calma poco a poco, si pones la intención de calmar tu energía esta se irá calmando lentamente y del mismo modo con las emociones.

Ahora lleva tu atención al centro del pecho y observa la luz que emana del corazón, permite que esta fluya y se esparza por todo el cuerpo. Conecta con el amor, e incluso permítete conectar con momentos de tu vida en los que sentiste grandes dosis de amor por parte de los demás hacia ti. Esperar unos veinte segundos.

Ahora permite conectar con el momento en los que has mostrado el amor que sientes hacia tus seres queridos, esperar veinte segundos. Desde el amor intenta permitir que este envuelva todo tu cuerpo en forma de luz rosa, creando una esfera rosada a tu alrededor. Siente la vibración y como lentamente la confianza va aumentando en ti. Conecta con la energía de la confianza y la esfera que era de color rosada ahora se torna dorada. Espera unos segundos. Con la esfera dorada siente la confianza plena con tu corazón y decídete a afrontar tu camino. Fin

La confianza llega cuando el alma se expresa a través de nosotros, a los niños les resulta muy fácil conectar con su alma, si aprenden a actuar desde esa conexión su confianza hacia la vida aumentará, porque conectarán con la certeza de su plan de vida. Del mismo modo tú puedes conectar con la certeza de tu plan de vida y permitir que este se exprese, recuerda que la vida a cada instante te da nuevas oportunidades para que puedas realizar aquello que nace de tu corazón y que forma parte de tu plan de vida, siéntelo desde adentro y habrás conectado con la confianza.

Artículo escrito por Liberto Bosch





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El Desapego "14 de 36 ciclos"


En ocasiones nos aferramos a pensamientos y sentimientos del pasado, a menudo, el hecho de apegarnos a esos pensamientos o sentimientos hace que no podamos avanzar por no querer soltar. Dejar paso a lo viejo y ceder el camino a lo nuevo forma parte de un proceso de desapego por el que todas las personas pasamos en distintos momentos de nuestras vidas. Si somos conscientes de ello es mucho más fácil trabajar el desapego desde la serenidad y la calma dando así nuevas oportunidades a una vida basada en la confianza y el amor hacia lo que viene.

Los niños pueden aprender a trabajar el desapego con pequeñas cosas como pueden ser juguetes que ya no emplean y que pueden servirles a otros niños, de esta forma, ellos pueden aprender que lo que ya no les resulta útil, quizás puede servir a otros más pequeños. El apego no tiene sólo porque ser a cosas materiales, de hecho, siempre que hay apego nace desde la emoción. Si transmitimos a los niños el valor de gestionar sus emociones y desapegarse de aquello que no les resulta útil a ellos, pero puede ayudar a otros, les estaremos transmitiendo una herramienta capaz de soltar el pasado y mirar hacia el futuro desde la confianza y el amor.

A continuación, vamos a proponer una meditación que se puede trabajar con los niños y también con los adultos, siempre que sintamos un apego podemos hacer esta meditación para el desapego. De la misma forma que las anteriores meditaciones si eres padre o madre puedes hacerla por las noches con los niños, pues es un buen momento para que se calmen antes de ir a dormir y quizás están más receptivos. Si eres profesor o profesora puedes hacerlo en el momento que creas más conveniente de la clase, quizás antes de empezar para ayudarles a entrar en calma o igual al finalizar la clase, se puede hacer incluso en la mitad de la clase. Es una meditación que no dura más de cinco minutos, si eres adulto y quieres hacerla puedes elegir el mejor momento que creas más conveniente para ti, está bien probar a primera hora del día o antes de ir a dormir, o sencillamente en un momento de calma a lo largo de tu día y así descubrir cómo te sientes mejor.

Meditación para trabajar el desapego

En primer lugar, colócate en una posición cómoda, cierra los ojos y céntrate en tu respiración. Durante unos instantes observa la respiración e intenta que esta se vaya calmando poco a poco, mientras lo haces ver relajando el abdomen, los hombros, el cuello y elimina toda la tensión de la mandíbula. Mantén los ojos cerrados y suaviza la zona del rostro. “Tomate unos segundos para entrar en calma siguiendo estas pautas”

Ahora visualiza una esfera de color amarilla que rodea todo tu cuerpo, esta esfera te ayuda a entrar en contacto con tu emoción, simplemente observa. ¿Qué emoción sientes en este momento que te impide seguir adelante? Tomate unos instantes para observar

¿Realmente tienes necesidad de continuar anclado a esa emoción?

Hay emociones hermosas que vivimos en el pasado y siempre estarán en nuestro corazón, ese tipo de sentimientos nos pertenecen y forman parte de nosotros, nos beneficiarán siempre que no impidan nuestro progreso hacia nuevas fronteras, aperturas a nuevas situaciones y caminos que nos ayudarán a avanzar hacia delante trayendo nuevas oportunidades de aprendizaje y experimentación. ¿Necesitamos de verdad aquello que nos negamos a soltar para avanzar?

Si sientes que todavía tienes necesidad de seguir experimentando desde el corazón con esa emoción entonces haz caso tu corazón, por el contrario, si sientes que tu corazón te impulsa a seguir hacia delante entonces puedes plantearte soltar con amor. Tomate unos segundos para observar que es lo que sientes en realidad.

Conéctate con el amor de tu corazón y sincronízalo con el sentimiento de tu emoción, fusiona tu sentir y libérate del miedo a soltar, pues en realidad es el miedo el que te impide avanzar. El corazón siempre nos guía a través del camino más beneficioso para nosotros, cuando nos perdemos entre la mente, la emoción y el corazón es cuando nos apegamos por el miedo a equivocarnos. Si conseguimos conectar con el amor que sentimos podremos crear la confianza necesaria para seguir avanzando. Recuerda que sólo tú puedes sentir el camino que pulsa tu corazón para que los sigas, aprende a escuchar esa pulsión y los apegos del pasado se soltarán convirtiéndose en propulsores del camino.

Haz esta meditación siempre que sientas la necesidad y compártela con los niños ayudándoles a que sigan el camino que pulsa su corazón sin miedo a soltar anclas del pasado.







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La prosperidad "13 de 36 ciclos"


La prosperidad es la energía que nos impulsa y nos ayuda a que vibremos en la abundancia del avance evolutivo. Ir hacia delante con todo lo que necesitamos para prosperar es un valor que debemos trabajar con confianza, seguridad, autoestima y sobre todo, tenemos que creer en nosotros mismos para poder prosperar.

Los niños/as aprenden desde pequeños una cantidad de virtudes y valores que se van desarrollando con el tiempo, la prosperidad les puede dar el enfoque evolutivo de progresar hacia las metas de su corazón. La prosperidad es a menudo el valor que ayuda a emanar la energía del amor, y es desde ese amor que todo gira para que podamos prosperar. Los bienes materiales nos pueden ayudar a estar mejor, más el verdadero progreso espiritual viene de la prosperidad del corazón.

Meditación para trabajar la Prosperidad

En el momento del día que más conveniente veamos podemos enfocar esta meditación dependiendo del contexto o el entorno, si eres maestra/o puedes hacerlo en el medio de la clase para ayudar a calmar, en cambio de clase para comenzar tranquilos. Si eres madre/padre puedes hacerlo a la hora de ir a dormir, ayudándoles a conciliar el sueño o al levantarse si hay tiempo. Si quieres hacerla tú, puedes hacerla para conectar con la prosperidad del amor.

Cerramos los ojos, relajamos el cuerpo y visualizamos una esfera de color rosa que representa la prosperidad de la energía del amor. (Esperamos unos segundos) La esfera nos envuelve y nos ayuda a conectar con la luz de nuestro corazón, se hace cada vez más grande y nos enseña imágenes de cómo podemos amarnos y querernos a nosotros mismos/as. (Esperar unos 15 segundos) Recordamos todas las veces que hemos hecho algo por amor hacia nuestro cuerpo, cuidándonos, queriéndonos. Nos enfocamos en los hábitos saludables, en los momentos de cariño que hemos recibido y lo hemos permitido abriendo nuestro corazón.(Esperar 15 segundos) Ahora nos enfocamos en todas las ocasiones que hemos ofrecido amor a los demás, y cómo hemos podido prosperar con nuestras relaciones y amistades cada vez que hemos abierto el corazón permitiendo expresarnos desde lo más profundo de lo que sentíamos, cada vez que hemos apartado las barreras de la vergüenza y hemos dado un abrazo o una muestra de cariño hemos conectado con la prosperidad del amor. El amor lo es todo y cada vez que hemos actuado sin barreras desde el amor del corazón hemos prosperado. Así que cada vez que demos una muestra de cariño, apartando las vergüenzas y mostremos nuestro verdadero sentir, estaremos prosperando hacia el amor. Cada vez que hagamos algo amándonos a nosotros mismos también estaremos prosperando hacia el amor. Trasmitamos a los niños como se puede prosperar hacia el amor.








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