Desde Agartam educación te proponemos que recuerdes lo
beneficioso que es el amor y lo expansivo que puede llegar a ser cuando
actuamos permitiendo que se exprese, te proponemos que lo transmitas a los
niños y que lo disfrutes en tu día a día, cocinando con amor para ti y para
ellos, vistiéndote con amor para ti y los demás, respirando con amor conectándote
al entorno donde te encuentras, disfrutando de cada instante como si fuese
único porque en realidad lo es. Te proponemos que lo transmitas a los niños, a
tus compañeros de trabajo, a los adultos, a las personas mayores y en general
al mundo. El amor es mágico, siéntelo, permite que fluya, que se exprese y disfrútalo.
Meditación para uno y para todos
Cierra los ojos, siente tu respiración, observa el latir de
tu corazón, presta mucha atención y disfruta de ese instante en que cada
pulsión que emite tu corazón te da una oportunidad nueva de vivir y disfrutar. Se
consciente de la magia que llega a ti a través de tus sentidos, escucha tu
entorno e intenta disfrutar de lo que escuchas, no lo juzgues, simplemente
escucha y agradece que puedes oírlo, se consciente de tu cuerpo y la fortaleza
interior que tienes para hacer miles de movimientos diarios, movimientos que te
permiten comer, reír, disfrutar, compartir, observar y sobre todo vivir. Conéctate
al amor de tu interior que se encuentra en tu corazón y permite que fluya a
través de cada cosa que emana de tu ser. Vive, ama y se feliz.
Ofrece esta meditación a los niños en el momento que más
conveniente creas, si eres una profesora en un cambio de clase o en mitad de
una clase, si eres un padre o una madre al llevarlos a dormir, al despertarse o
simplemente en un momento de calma y tranquilidad. Si eres un adulto intenta
hacerla tú y sentir disfrutando de conectarte al amor. Hazla siempre que te
vibre y resuene compartirla con los demás.
Desde Agartam educación queremos dedicar un pequeño apartado
a los padres y madres por la labor que hacen de educar con amor, a los
profesores/as por transmitir tantos conocimientos a los niños que tanto tiempo
a costado conseguir, y por último gracias al lector de este pequeño artículo,
espero que podáis disfrutar y amar lo mismo que he disfrutado yo expresando
estas palabras.